El brote de coronavirus está provocando dudas acerca del uso de dinero en efectivo. Por ejemplo, como medida de prevención de contagio, en China, los bancos recibieron la orden de desinfectar el efectivo antes de ser emitido al público. Independientemente de si existe un riesgo comprobado o no, el factor psicológico de las personas que piensan que el efectivo es un foco de infección ha generado dudas en la población.
No existen pruebas que indiquen que el uso del dinero en efectivo genere contagios. Sin embargo, se conoce que los virus infecciosos, incluidas otras variedades de coronavirus, pueden vivir en superficies inertes como el papel, el plástico, el cartón y el acero hasta varios días.
Según los Centros para el Control de Enfermedades de EE. UU., «Es posible que una persona pueda infectarse de COVID-19 al tocar una superficie u objeto que tenga el virus y después tocar su propia boca, nariz u ojos, pero esta no se considera la principal forma de propagación del virus.»
Si bien no ha existido un comunicado oficial de la OMS, esta recomienda a las personas lavarse las manos después de tocar los billetes porque el virus puede aferrarse a la superficie durante varios días.
Para evitar la propagación de la enfermedad, se recomienda a las personas usar métodos de pago digitales (cuando sea posible), los cuales no generan contacto.
Algunos países están presentando ya una disminución en el uso del efectivo como principal medio de pago, según la Federal Reserve Bank of San Francisco, en Estados Unidos solamente el 36% de los pagos se realizó en efectivo o cheque para el año 2017, el resto de pagos se los realizó con tarjetas de crédito o débito y otros medios electrónicos; además se evidenció que, en su mayoría, el efectivo se usa para llevar a cabo transacciones menores a los USD 10,00 (diez dólares). En China el efectivo va perdiendo terreno cada vez más, específicamente ante el pago con teléfonos móviles. En el país asiático, menos del 10% del total de pagos se realizan en efectivo.
¿Qué alternativas de pago diferentes al efectivo existen en Ecuador?
En nuestro país los métodos más populares después del efectivo son las tarjetas de crédito y débito, también se han popularizado las transferencias bancarias como método de pago inmediato. El dinero electrónico también se ha presentado como una alternativa para los ecuatorianos, sin embargo, éste no ha tenido aún una acogida generalizada.
Pero ¿Qué ventajas nos brinda el dinero electrónico ante las circunstancias actuales?
Pongámonos en contexto, el dinero electrónico en Ecuador es impulsado y respaldado por las instituciones financieras del país, tanto bancos, cooperativas y mutualistas brindan este servicio, al cual se le ha denominado Billetera Móvil o BIMO.
El dinero electrónico tiene su respaldo en el dólar estadounidense, es decir que un dólar electrónico, está respaldado con un dólar físico, el cual puede ser canjeado en cualquier momento por el usuario. Sin embargo, ese no es el fin último de este método de pago.
Ante la situación que se vive actualmente en el mundo, una herramienta como BIMO nos sería de gran utilidad, ya que permite al usuario realizar transacciones del día a día, como el pago en la tienda de su barrio o la farmacia.
Las recomendaciones generales para evitar el contagio de COVID-19 es limitar al mínimo el contacto físico con otras personas y, en caso de coincidir en un mismo espacio, mantener una distancia prudente. Tomando en cuenta estas indicaciones y las explicaciones antes detalladas, te animamos a probar la billetera móvil como una opción de pago, pues, puede ser gran utilidad. Si no conoces cómo acceder a esta herramienta te dejamos el siguiente link para tu información: https://bimo.ec/afiliacion/